CAP 4. ACEPTACIÓN

ACEPTAR, perdonar, y soltar es la forma que conozco para poder avanzar, no con esto quiero decir que debemos resignarnos, pero tampoco desgastarnos intentando encajar o acomodar las situaciones que vivimos por resistencia al cambio; descubrir que es liberador dejar ir, hace parte de este capítulo, dejaron de importar los estereotipos, esquemas, prejuicios, las opiniones, los juicios, entre muchas otras cosas que anteriormente me hacían sentir agredida. Iniciaré hablando de como comenzó todo, porque hay un antes y un después en mi historia.

Treinta años de mi vida los gasté descubriendo quién era, para eso tuve que alejarme de los amigos del montón, las relaciones tóxicas, los egos, los reconocimientos, los aduladores, los excesos, los oportunistas, en fin, de todo aquello que me robaba la paz; aún viajar, comprar, beber, entre muchos otros sofismas, que en su momento traen satisfacción, pero que solo ocultan detrás de sí, inseguridades, baja autoestima, falta de valor, engaño, apariencias y demás silogismos propios de una sociedad consumida y enajenada por los estereotipos que nos vende el mundo. Estar al límite de la vida, te da la oportunidad de ver con otros ojos, redescubrirte como castillo de naipes, ese mundo de fantasía, como un cuento de lobos y cerditos, se destruye al primer suspiro, al final no tienes que elegir, a veces solo se van, las amistades, las relaciones falsas, las fachadas, las mentiras, la vida toma su curso, hay que dejar la resistencia, todo hace parte del plan de DIOS.  

Cuando estás en el fondo, solo tienes una opción; o te quedas en el suelo o te levantas, pasé por varios estadios; es un duelo verme en retrospectiva, con todos mis cambios, sin filtros, enferma, muriendo rápidamente bajo una difícil realidad, me permitió admirar los milagros de la fe, soy evidencia de muchos milagros, así que pensar en lo que me faltaba, como el pelo, las cejas, las pestañas, pero que a la postre volverían, me daba un parte de tranquilidad que por fortuna tenía uñas, suena extraño, pero se valora todo. Sin público para seguir actuando, reconocerse y aceptarse, se hace prioritario. 

Dios reescribió mi historia, "reiniciando la vida", dando valor a las cosas importantes, el cuidado y el autocuidado, el servicio, la gratitud, la conciencia, el amor y podría enumerar aún más factores que me permitieron renacer, pero me gustaría centrarme en mi belleza interior, esa belleza cautivante que se refleja desde el alma al exterior, para ello recomiendo a todas las mujeres el libro de "cautivante",lo he leído ya tres veces pero en diferentes escenarios de mi vida y todos me han mostrado nuevas cosas, ha sido mi salvavidas en muchas ocasiones; me habla sobre la belleza reveladora de mi alma y cuando vuelvo a recordar quién soy, vuelvo a brillar con la luz que Dios me da. Nunca olvidaré la primera vez que me vi calva, pues mis ojos brillaban como nunca, belleza cautivante, esta solo viene de una mujer que se reconoce y sabe cuál es su lugar en el mundo. Pregunto; ¿Qué mentiras te dices al espejo?, ¿Cómo te afecta lo que digan los demás?, ¿Qué heridas marcaron para siempre tu identidad?, pero la más difícil ¿Qué belleza revelas al mundo?.

Nuestro enemigo más grande vive dentro de nosotros, allí donde el pasado viene a recordarnos todos los defectos, fracasos, frustraciones, falta de perdón; con el único objetivo de contaminar el alma o el cuerpo como la ansiedad y el estrés, "lo importante es invisible a los ojos"(como lo dice otro de mis personajes favoritos, el principito) al descubrir y desenmascarar al mentiroso, el engañador, al acusador, buscando apagarnos la vida. Despierta la belleza reveladora de tu alma, que viene del corazón de Dios, quien ilumina cada paso de mi vida. 

Así que los cambios físicos, el dolor, las cicatrices, los diagnósticos, las depresiones, los abusos, los descuidos, la gente tóxica, los factores destructores que permití, pasaron al plano de las victorias, hoy son mi bandera, me recuerdan lo fuerte que soy, lo valiente y guerrera, aunque no se fueron los problemas, pero aprendí que "lo único que no tiene solución es la muerte", aun cuando suene a cliché, la esperanza siempre estará en estar vivo y ver la vida que fluye a nuestro alrededor, dando gozo a nuestro corazón y haciendo sonreír a Dios. Para quienes quieren activar la felicidad, los invito a orar, agradecer, amar, ver los maravillosos detalles de la naturaleza, la vida de nuestras mascotas o los animales que nos rodean, esto activa la generación de oxitocina en nuestro cerebro, descansar, dormir, celebrar los logros pequeños o grandes a diario, hacer ejercicio, comer saludable, para activar la generación de dopamina, disfrutar, recuerda lo lindo de haber llegado a este momento, trae a la memoria los mejores recuerdos, visualizar lo bueno que está por venir, soñar, activando la  generación de serotonina, bailar, cantar y alabar, tener un hobby, apasionarse por algo, enfocarse, reír , activa las generación de endorfinas, todas las anteriores, hormonas de la felicidad. 

Por otra parte desaprender no es fácil y aprender menos, pero con algo de disposición, viendo el aprendizaje que viene con cada circunstancia, podemos crecer interiormente, al mejorar sin pretender disfrazar la realidad, aceptamos lo que nos cuesta y duele, sin apegos ni menoscabar el poder de Dios, porque dentro de sus cualidades de ser omnipotente, no hay imposibles, asimismo entender que si antes podíamos correr 10 kilómetros y hoy solo se puede caminar máximo 3, hay que ser agradecidos, también es una bendición, esto nos permite valorar nuestras piernas, sin ellas ni siquiera podríamos hacerlo, nos acostumbramos tanto a dar por hecho las cosas, que solo las valoramos cuando ya no están.

Comer bien, disfrutar el verdadero sabor de los alimentos, dejar los aderezos, dulces y demás distractores de nuestro paladar, es una experiencia que vale la pena intentar. Respirar profundo y consciente, ver la vida, amar a nuestra familia, conocer personas nuevas, reafirmar las buenas amistades, viajar para aprender, servir, cuidar, y sobre todas las cosas, ser valiente, tomar riesgos, nos dará enfoque, adrenalina,  energía porque no solo la satisfacción personal, alimenta eso sino tener propósito e identidad y ese solo lo pude conocer a través del espíritu. 

Para quienes se toman el tiempo de leer mis artículos, les regalo un consejo mas, sean ustedes mismos siempre, tengan una vida propia con la que sientan paz, vivan con gozo siendo agradecidos, comuníquense de manera efectiva con las personas que los rodean, menos redes sociales y celular, miremos más a los ojos, descubramos juntos la belleza reveladora de las almas, sean sinceros pero con empatía, a nadie le interesa tu opinión destructiva, así que piensa siempre si te dirías a ti mismo lo que le dices a otros, auto examínate, revisa los vacíos en tu interior y llénalos de lo único que puede hacerlo, de Dios, las cosas, personas y hasta la comida, jamás podrán hacerlo, mientras que su amor inagotable, vence los límites de la imaginación. Para terminar, sean amables, no sabemos con qué están batallando en su mente y en su corazón las demás personas.