CAPITULO 3: Por el poder de amor

EL amor nos moviliza en todo sentido, a amar a otros, a cuidarnos y a dar. No es un concepto que se pueda escribir fácilmente, pues tiene muchas perspectivas, sin embargo, hay una que me gusta mucho y es la bíblica, que se define en 1 corintios 13, el amor verdadero, "Si no tengo amor, de nada me sirve hablar todos los idiomas del mundo, y hasta el idioma de los ángeles. Si no tengo amor, soy como un pedazo de metal ruidoso; ¡soy como una campana desafinada"; Alguien alguna vez me dijo, que la vida es como una melodía, con tonos altos y bajos, e infinidad de matices, si la música tuviera un solo tono, sonaría estruendosa y monótona, a eso se le llama ruido; Lo que me lleva a cuestionarme, ¿por qué tenemos que esperar a que la vida sea diferente?, en un solo tono, para no sufrir, decepcionarnos o simplemente, negarlos la oportunidad de amar, por el miedo a volver a ser lastimados o evitar serlo. 

Hay que sortear las adversidades, con todos sus cambios, amar tiene sus riesgos, pero son más las recompensas, al hacerlo; "Si no tengo amor, de nada me sirve hablar de parte de Dios y conocer sus planes secretos. De nada me sirve que mi confianza en Dios me haga mover montañas", sin fé, es imposible ejercer el amor, van de la mano,esa posibilidad de creer en algo que no puedo ver ni tocar, porque no hay ninguna certeza de su existencia, es lo mismo que me hace confiar y creer en Dios, por que sé que opera en mi vida, por eso, para mi Él es amor, lo ví en muchos milagros, alrededor de todo este proceso, superando todo diagnóstico de muerte. 

Por otra parte hay cosas que definitivamente no puedo controlar y se salen de mi razonamiento, como creer que soy sana o pensar que no soy capaz de resistir más dolor, o ver el dolor de las personas que me rodean, por verme deteriorada, hubo mucha gente que de seguro en algún momento quiso sostener mi dolor, estar en mi lugar, para no verme sufrir, pero eso humanamente es imposible, creer que Él sí, lo puede hacer, me hace poner toda mi esperanza en algo que está por encima de mis propias fuerzas; Como lo dice filipenses 4-.13, "yo soy fuerte en Cristo que me fortalece".

"Si no tengo amor, de nada me sirve darles a los pobres todo lo que tengo, de nada me sirve dedicarme en cuerpo y alma a ayudar a los demás"; El verdadero amor nos mueve a hacer cosas por otros de forma desinteresada, cuando las hacemos de forma condicional, es cuando salimos heridos, pues esperamos más de lo que otros están dispuestos a dar por nosotros, pero cuando recibimos de alguien lo que no esperábamos, simplemente lo recibimos de la misma forma en que lo dimos, con una gran alegría en el corazón, pero la única forma en que podemos hacer esto posible, es por el amor que nos inspira  a hacerlo; La palabra inspiración quiere decir "respiración de Dios". Se deriva de las palabras griegas Tehos (Dios) y pnein (respiración). 

A si mismo, "El que ama tiene paciencia en todo, y siempre es amable. El que ama no es envidioso, ni se cree más que nadie. No es orgulloso. No es grosero ni egoísta. No se enoja por cualquier cosa. No se pasa la vida recordando lo malo que otros le han hecho. No aplaude a los malvados, sino a los que hablan con la verdad. 7 El que ama es capaz de aguantarlo todo, de creerlo todo, de esperarlo todo, de soportarlo todo", la expresión máxima del amor, parece algo imposible, por consiguiente, es un verbo que humanamente es imposible de llevar a la acción, pero por esa inspiración de Dios, somos capaces de amar a otros, por eso los mandamientos más importantes, hablan de amar, a Dios, a otros y a nosotros mismos. 

El perdón y la reconciliación son las expresiones de amor más grandes que un ser humano puede tener por el otro, especialmente por sus enemigos, es algo que nos cuesta, perdonar es una decisión diaria, nos sana, pero así mismo el no perdonar, trae el efecto contrario, se vuelve enfermedad, cáncer y trae consigo muerte. Es algo que exige de todo nuestro amor. Yo he decidido perdonar a quienes causaron en mí, heridas de muerte, porque gracias a eso, puedo recibir los milagros de vida y bendición que Dios tiene para mí. 

Como mi familia que me acepta tal cual soy, me ama a pesar de mis equivocaciones y además me apoya. Las personas vienen y se van, pero "solo el amor permanece para siempre"; por ejemplo, es capaz de  hacer que mi mamá saque fuerzas para levantarme de la cama, bañarme y cambiarme los pañales a mis 30 años, tal cual como lo hizo conmigo, cuando apenas era una bebe, o que mi papá, se desvele toda una noche conmigo, por un dolor de cabeza insoportable, él me masajeaba y eso me ayudaba a que doliera menos, o tener que ir a quimioterapia y sentarse por horas en un pasillo a esperarme, o que mi hermano prefiera gastarse sus ahorros en mí, para poner una sonrisa en mi rostro, cumpliendo el sueño de todo niño, ir a los parques de Orlando, en USA, como recompensándome por haber llegado al final de mi tratamiento; Podría quedarme enumerando las miles de formas en que no solo mi familia, sino que personas a mi alrededor, fueron inspiradas para regalarme un pedacito de su corazón. 

"Hay tres cosas que son permanentes: la confianza en Dios, la seguridad de que Él cumplirá sus promesas, y el amor. De estas tres cosas, la más importante es el amor", por eso es lo más importante del proceso, el ingrediente secreto para superar cualquier desafío y todo eso se traduce en lo que para mí es Dios. Mi vida es mejor con Él, soy una mejor persona, lo necesito", por eso nunca me sentiré sola, por que Él me toma de la mano, para recordarme que está en cada paso que doy, que Él ya los conoce y que su plan siempre será mejor que el mío. Me arriesgué a estar junto a Él y en ello, perdí a muchas personas que creí, me amaban, dolió mucho, pero hoy en día sé que también tenían su propósito. Doy gracias al amor de Dios, que salvó mi vida, es la médula de lo que soy.